lunes, 1 de junio de 2009

Mientras la muerte en la escombrera de la comuna 13 arrecia, nuestro reclamo por la vida se mantiene


MIENTRAS LA MUERTE EN LA ESCOMBRERA DE LA COMUNA 13 ARRECIA, NUESTRO RECLAMO POR LA VIDA SE MANTIENE


Esta vez en el barrio el Salado.

Desde las operaciones militares en la COMUNA 13, sus barrios se sumen en la confrontación armada entre pequeños combos que ejercen el control financiados por las estructuras paramilitares y mafiosas que hacen presencia en toda la ciudad. Sus integrantes son jóvenes también, que sin discriminación atentan en contra la dignidad de mujeres, hombres, niños, niñas, lideres sociales y comunitarios; personas inocentes que su único reclamo ha sido en derecho a la vida.

Desde hace años, los habitantes de los barrios de la comuna 13 denuncian la presencia y las atrocidades de los grupos armados; reclutan, controlan, asesinan, amenazan, se enfrentan; y todo ello se mantiene ante el silencio que parece cómplice del Estado. Lo particular de todo ello es que se trata de la comuna mas militarizada de la ciudad; pues se calcula que hay un efectivo por cada 340 habitantes, en un sector con 140 mil personas aproximadamente, de los cuales mas o menos la mitad pertenecen al estrato uno, siendo esta la comuna mas pobre de la ciudad.

Es por ello que en esta ocasión queremos hacer mención de los lamentables hechos ocurridos el pasado jueves 21 de mayo del presente año en el barrio EL SALADO, en el sector de la escombrera, zona que ha presenciado las múltiples vulneraciones de derechos humanos que ocurren en la comuna.

El jueves 21 de mayo, siendo más o menos las 4:30 de la tarde, hombres jóvenes armados del mismo barrio recorrieron las calles buscando supuestamente a varios jóvenes que se habían robado unas tejas de la escombrera.

Los encontraron y se los llevaron al sector de la escombrera en donde fueron asesinados 3 jóvenes; en ese momento YESID TORRES de 13 años y su hermano JUAN MANUEL ARBOLEDA TORRES de 9 años, que venían de hacerle un mandado a su mamá pasaron por el lugar de los hechos.

Allí fueron abordados por los que minutos antes habían asesinado los supuestos ladrones; los trataron de sapos y les dijeron que si los dejaban ir los sapiaban, de manera que los hombres armados les dijeron que corrieran, a lo que ellos obedecieron y comenzaron a dispararles.

YESID fue asesinado allí mismo, mientras su hermano JUAN MANUEL de 9 años, alcanzo a escapar herido, y trasladado luego a un hospital.

Esa tarde fueron asesinados en el Barrio el SALADO 4 jóvenes y herido un niño que alcanzo a escapar.
Las instituciones del Estado guardaron silencio frente a esto igual que los medios de comunicación; mientras que el fin de semana anterior el ALCALDE de Medellín visitaba la zona para inaugurar las dos canchas deportivas del barrio, y hablar de los logros de seguridad en esa zona.

Frente a estos hechos y tal como lo hemos mencionado en ocasiones anteriores queremos manifestar lo siguiente:

La muerte violenta no se justifica por ningún motivo, no hay ninguna razón para eliminar a otro ser humano, no puede justificarse la muerte de alguien porque expende drogas, o porque es negro o marica, mucho menos porque es joven, porque se para en una esquina o porque está en la calle a altas horas de la noche. Una sociedad madura es aquella que es capaz de resolver sus conflictos sin necesidad de eliminar a las personas; el valor de cada ser humano es incalculable y por tanto, no podemos guardar silencio ante la muerte que arrecia; nada puede servir de excusa para asesinar a alguien. Por ningún motivo podemos justificar la muerte de los jóvenes en las calles; pues ha sido justamente la legitimación de la muerte violenta lo que ha servido para posicionar una tradición histórica de eliminar al otro y de mantener una cultura violenta en la ciudad. Por tanto necesitamos en cambio, rescatar el valor de la vida y su defensa.

Nos manifestamos en contra del escenario de muerte que quieren promover los actores armados que hacen presencia en esta comuna, tanto los actores legales como los ilegales, que han utilizado la población juvenil para engrosar sus filas, para armarlos, para hacerles creer que tienen un enemigo al que tienen que combatir.

Manifestamos que la muerte violenta no se justifica, sean quienes sean los muertos, vengan de donde vengan las balas; y mucho menos cuando se trata de menores de edad como es el caso de YESID Y JUAN MANUEL.

Por lo tanto y con fundamento en los hechos y las consideraciones mencionadas hacemos las siguientes exigencias:
Que las Instituciones del Estado como Fiscalía, Procuraduría y Unidad Permanente de Derechos Humanos, adelanten las actuaciones respectivas que tiendan a la protección de la población civil que se encuentra en medio de la confrontación armada, y en especial a que adelanten las investigaciones correspondientes frente a este grave hecho.

Que las organizaciones de derechos humanos como Naciones Unidas y Defensoría del Pueblo adelanten las actuaciones y seguimientos a este caso con la finalidad de que se proteja la vida de JUAN MANUEL, y en general de los niños de esta comuna.

Que la Fiscalia cumpla con la labor constitucionalmente asignada de investigar los hechos que ocurrieron en el barrio el SALADO, el pasado jueves.

Que la alcaldía de Medellín reconozca su incapacidad para controlar los grupos armados y las estructuras paramilitares que siguen haciendo presencia en los barrios.

Manifestamos públicamente que aspiramos a una sociedad en la que las personas no sean eliminadas, a que a nadie se le nieguen sus derechos, una sociedad desmilitarizada, sin ejércitos, en la que las salidas a los conflictos no sean armadas; una sociedad que vea a sus jóvenes como la posibilidad de transformación y no como un obstáculo; que entienda que la libertad y la vida son los principios mas valiosos de una comunidad y por tanto MIENTRAS LA MUERTE EN LA ESCOMBRERA COMUNA TRECE ARRECIA, NUESTRO RECLAMO POR LA VIDA SE MANTIENE.


Por: Red Juvenil