lunes, 11 de enero de 2010

CNT, 100 años de anarcosindicalismo (1910-2010)

El día 1 de Noviembre de 1910, en el local barcelonés del Círculo de Bellas Artes, quedó constituida la CNT (Confederación Nacional del Trabajo). Esta Organización, heredera de la Regional Española de la 1ª Internacional (1870), nació del propio seno del Movimiento Obrero como la primera organización sindical autónoma en este país.

Asumiendo el lema internacionalista “la emancipación de los trabajadores será obra de los trabajadores mismos, o no será”, la CNT se hizo depositaria de la rebeldía popular que, como una corriente soterrada, se opone al poder a lo largo de los tiempos, para emerger triunfante en momentos concretos desde el imperio medio egipcio a la Revolución Francesa, germen de los únicos procesos históricos en que la humanidad avanzó notoriamente por la senda de la libertad, la justicia, la igualdad, la dignidad y el progreso.

Sobre el sencillo acuerdo de crear una organización obrera independiente de los poderes políticos, religiosos y económicos, como condición indispensable para mejorar las condiciones de vida de los trabajadores hasta el fin de la explotación, comenzó la CNT su actividad anarcosindicalista. En pocos años aglutinó la mayoría del movimiento obrero, consiguiendo importantes conquistas sociales y económicas que constituyen ya un legado de valor incalculable para la sociedad actual.

La jornada laboral de ocho horas, la jornada semanal de treinta y seis horas, la erradicación del trabajo infantil, la igualdad de la mujer y la incorporación a los quehaceres diarios de valores como la solidaridad, el federalismo, la ecología, el feminismo, el amor libre, el antimilitarismo, el ateísmo ..., hoy tan en boga, son parte de ese legado que alcanzó su cenit en la Revolución Social de 1936, cuando la utopía -el comunismo libertario- se convirtió en modo de vida cotidiano de todos los territorios liberados

La reacción del capitalismo internacional, permitió al ejército fascista de Franco convertir ese sueño revolucionario en una pesadilla de cientos de miles de personas perseguidas, asesinadas y desaparecidas, tras la victoria golpista en 1939. Mas ni uno solo de los culpables – todos conocidos, algunos políticos en activo- de aquel régimen de terror, uno de los más criminales de la historia, resultó tan siquiera públicamente reprobado, merced al vergonzoso pacto de impunidad con el franquismo, que la izquierda nacional democrática (PSOE, PCE, UGT y CCOO) selló en sus acuerdos de rendición al capital, conocidos como “la transición española” (1977).

Pese a todo, el pueblo siguió defendiendo, muchas veces con su vida, los sencillos principios del anarcosindicalismo: independencia, autonomía, federalismo, autogestión, asamblea, solidaridad y acción directa, es decir, autoorganización para rechazar toda injerencia de partidos políticos u otras instituciones económicas, religiosas, etc. en los asuntos obreros. Huelgas, manifestaciones, represión y tortura fueron la crónica diaria de la dictadura (1939-1976), hasta que con su desaparición el movimiento obrero volvió ilusionado a reconstruir su anhelada CNT (1977). Vivimos nuevos años de incesantes conquista obreras. Las jornadas de Montjuich, o San Sebastián de los Reyes, jalonaron el poderoso renacer confederal en la década de 1970.

El avance del movimiento obrero, de nuevo autoorganizado por la CNT, mediante luchas ejemplares como la huelga de gasolineras de 1978, suscitó la reacción del capitalismo, esta vez apoyado en el estado democrático y su aparato institucional (gobiernos, partidos, jueces, burocracias sindicales, …). El éxito sindical de la CNT fue reprimido policialmente (Caso Scala, 1978) y junto a campañas de silencio y propaganda difamatoria en los medios de comunicación, generaron desastrosas consecuencias para el movimiento obrero de este país.

La debilitación de la presencia anarcosindicalista en el movimiento obrero posibilitó la pérdida de derechos adquiridos tras una larga y dura lucha sindical, por la desregulación y precarización laboral implantadas con la peor de las corrupciones que asolan el país: La Corrupción Sindical. Una corrupción oficialmente silenciada, que pervierte el sindicalismo en general a los ojos de los trabajadores, pero que es protagonizada fundamentalmente por los sindicatos institucionales- CC.OO y UGT-, cuyos "yuppies" sindicales cobran subvenciones y sumas millonarias a gobiernos y empresas como pago a su traición, por aceptar cuantas medidas se adoptan en defensa del capital y su creciente acumulación de beneficios ( EREs, Reformas Laborales, despido libre...)

A pesar de todo, miles de trabajadores y trabajadoras seguimos hoy en esa genuina organización obrera a la que llamamos CNT, manteniéndola exclusivamente con nuestros propios medios, convirtiéndola así en el único ejemplo vivo de sindicalismo de clase, capaz de enfrentarse a la opresión y el control social, la destrucción ecológica del planeta y la sobreexplotación económica, aspectos todos, inherentes al Capitalismo.

2010 tiene para nosotros una connotación especial: se cumple un siglo de existencia de la CNT. Es el centenario de un pueblo y la inestimable lucha de miles de personas, que a lo largo de estos cien años se han dotado de una herramienta ejemplar, a seguir para la clase obrera mundial, por su cultura propia, capacidad autoorganizativa, lucha radical, extensión popular y realizaciones revolucionarias en aras a construir una sociedad antiautoritaria y solidaria.

Estos ideales conforman la noble causa a la que aquí y ahora te invitamos.
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Almanaque


Comienza el año del deslumbrante CNTenario que también es el año del entenario de la Revolución Mexicana y el del Bicentenario de la Independencia de la ayoría de los países latinoamericanos. Puestos a conmemorar, recordemos que también ocurrieron otros magnoseventos en 1910:

Internacional.- Bélgica, Gran Bretaña y Alemania marcan sobre un papelucho cualquiera las fronteras entre sus respectivas colonias africanas: Congo, Uganda y el África Oriental [el nuevo mapa sirve para establecer un campeonato de genocidios; en sus primeras ediciones, la Liga es ganada por Bélgica demostrándose así que los equipos pequeños también son de temer, especialmente si su seleccionador es un rey] Amenazado por China, el Dalai Lama huye del Tibet y se refugia en la India [al revés de lo que pasaría décadas después, en esta ocasión los sacerdotes de la teocracia tibetana, los seráficos lamas, tuvieron tiempo para llevarse sus collares de huesos humanos] Los territorios de Arizona y Nuevo México son anexionados por los EEUU; asimismo, los gringos invaden Nicaragua y, a través de sus esbirros locales, deponen al presidente Madriz [todo sea por la democracia] So pretexto de reprimir una supuesta conspiración ácrata a la que atribuye la colocación de una bomba en el Teatro Colón, el gobierno argentino promulga contra los anarquistas una Ley de Defensa Nacional seguida de una ola de torturas contra el proletariado [cualquier parecido con el Caso Scala, no es mera coincidencia]

Imperio español.- Convenio hispano-marroquí: la monarkía española recupera Ifni [todavía faltaba casi un siglo para la singular matanza de las cabras del islote Perejil] Se celebra en Gernika la Fiesta del Árbol, con la plantación de un retoño de roble que representa las tradiciones vascas [los nacionalismos se extravían cuando se ponen fecha de nacimiento]

Obituarios y natalicios.- Fallecen el anarquista peruano Manuel González Prada y los escritores Samuel Clemens alias Mark Twain y León Tolstoi. Nacen Miguel Hernández y Jean Genet.

Agresiones de los religiosos.- El Senado italiano renueva la prohibición de celebrar procesiones religiosas en las calles. El parlamento prusiano aprueba la incineración de cadáveres con los votos en contra de centristas, conservadores y polacos. Una Real Orden autoriza en España los signos externos de religiones distintas a la católica [en los últimos cien años, ¿hemos mejorado posiciones en la sempiterna batalla contra el intrusismo inquisitorial?]

Rebeliones.- Asesinato legal de 25 japoneses acusados de intentar ajusticiar al Emperador [de haber conseguido los revolucionarios tan altruista propósito, es posible que el pueblo nipón se hubiera ahorrado los millones de muertos que, en años subsiguientes, costearon la megalomanía de su atildado reyezuelo] Motín de la marina de guerra en Río de Janeiro [un antecedente de la revolución de los marineros de Kronstadt (1917-1921), junto con la Makhnovina, la cumbre de la auténtica revolución rusa] Un alzamiento árabe en Palestina es violentamente reprimido por el ejército otomano [otra prueba de que los palestinos no llevan sólo 60 años luchando contra sus invasores sino que su rebelión viene de más antiguo]

MUNDO FACUNDO/ Antonio Pérez, el Otro


Por: Confederación Nacional del Trabajo (CNT)
Tomado de: cnt.es - Periódico CNT

¿Guerra justa? ¿o justamente guerra?



Dicen que la política hace extraños compañeros de cama, pero el Premio Nobel puede hacer unos aún más extraños. Ha habido muchos comentarios sobre la entrega de este premio al presidente Barack Obama y también debates sobre si es merecido o no. Al recibir el honor, su discurso no era sobre la paz sino sobre la guerra ––o para ser preciso “la guerra justa”. (Durante siglos los papas y príncipes han planteado sus teorías sobre lo que constituye una guerra justa, a diferencia de una guerra injusta).

Como si no fuera suficientemente irónico describir la guerra contra Afganistán como una guerra justa (no fue el estado de Afganistán, sino un grupo de extranjeros, que atacó a Estados Unidos), el aceptar el premio de la paz mientras Obama aceleraba una guerra hizo que el premio fuera igual de significativo que el último reality show en la tele. En lugar de “la guerra justa”, tal vez el tema del discurso debería ser “la justificación de la guerra”, algo en que los políticos son bastante buenos.

Difícilmente se le escapa a uno el contraste entre Obama y Martin Luther King, hijo, cuya previa recepción del premio, junto con su oratoria “Tuve una vez un sueño”, ahora fueron puestas al servicio de guerra. Pero si King viviera, no cabe duda que estaría protestando en lugar de aplaudiendo más guerra.

El amigo y redactor de los discursos de King, el reverendo doctor Vincent Harding, señala el discurso que King dio en la iglesia Riverside de la ciudad de Nueva York, donde se pronunció fuertemente en contra de la guerra en Vietnam. Mientras los líderes políticos, religiosos y mediáticos de la nación defendían la guerra como justa y necesaria, King vio el sufrimiento humano del pueblo vietnamita y lo encontró intolerable.

Según el libro de Harding, Martin Luther King: El Héroe Inconveniente, (Maryknoll: 1996), King le hizo unos comentarios instructivos al personal de la SCLC (Conferencia Sureña del Liderazgo Cristiano) después de leer un artículo sobre la guerra en la revista Ramparts en enero de 1967. Dijo King,"...Después de leer ese artículo, me dije a mi mismo, ‘Jamás volveré a guardar silencio sobre una cuestión que está destruyendo el alma de nuestra nación y destruyendo miles y miles de niños y niñas en Vietnam’" (p.101). Varios meses después, él predicó en la iglesia Riverside, donde dijo a la congregación que “los males del capitalismo son tan reales como los males del militarismo y el racismo” (p. 101).

Por otro lado, a la gente conservadora le encantaban los comentarios de Obama con respecto a la realidad del mal en las relaciones internacionales, porque él avaló la guerra como una solución, al referirse a ella como el motor económico más grande de la nación capitalista.

Hace 42 años, King habló directamente del mal; pero para King, la guerra era el mal, y no su solución.

Desde el corredor de la muerte, soy Mumia Abu-Jamal.

Traducción: Amig@s de Mumia, México


Tomado de: alasbarricadas.org
Caricatura: Vladdo

Campaña contra ONG Justicia y Paz. La involución cultural en el corazón de Latinoamérica

La mentira puede correr cien años,
pero la verdad la alcanza en un día.


Una vez mas en Colombia algunos medios de comunicación están siendo utilizados -y se prestan a ello- para adelantar campañas de desprestigio, obstaculizar la devolución de tierras a las comunidades desplazadas y crear climas propicios a los atentados a organizaciones y personas que además de ser victimas de infames calumnias, son calificadas como “marxistas” o “comunistas” remembrando la enfermedad del odio y la furia aniquiladora que fueron alentados durante la guerra fría (1).

En diciembre pasado se inició esta nueva campaña sobre Justicia y Paz, una organización no gubernamental que se ha destacado por su compromiso con la verdad y por el valeroso acompañamiento a las victimas de las regiones que han sido arrasadas a sangre y fuego por su valor económico o por ser consideradas estratégicas en la confrontación entre el Estados y las guerrillas.

Esta campaña difamatoria, de extrema gravedad en un país donde se cuentan por miles los precedentes que vinculan los falsos señalamientos con los crímenes en el marco de una concepción de la Guerra Política que tiende a subsumir a cualquier defensor de los derechos y las garantías fundamentales en la subversión, forma parte del proceso de degradación cultural impulsado por el nacional populismo de extrema derecha, el mismo proceso de ascensión del fascismo que se ha normalizado en amplias franjas de la comunicación masiva y la comunicación cotidiana en el país.

En esta dinámica puntual de involución cultural se yuxtaponen medios de comunicación como El Tiempo , que desde hace cerca de dos años está controlado por el Grupo Planeta de España, el diario El Colombiano de Medellín y Radio Súper, y columnistas como Fernando Londoño y José Obdulio Gaviria, que al mismo tiempo que comparten la comisión, a lo largo de sus vidas, de imborrables actuaciones contrarias a la ética más elemental, son parte principal de los áulicos del actual gobierno encargados de utilizar el acceso a algunos medios masivos de comunicación en campañas de desprestigio de quienes han tenido el valor extraordinario de denunciar a los mas altos responsables estatales de la maquinaria criminal que tantas vidas inermes ha cegado en Colombia, o en tender cortinas de humo que desvíen la atención colectiva del fracaso irremediable de políticas de seguridad llamadas “democráticas” pero en realidad concebidas y ejecutadas en favor de algunos los principales capitales nacionales y de las mega corporaciones que han impulsado en el escenario internacional el soporte a un gobierno seriamente cuestionado por su entrelazamiento con organizaciones delictivas.

La degradación cultural como proceso está unida indiscerniblemente en Colombia a la dinámica que alienta: el control creciente de la vida social, la manipulación emocional que acude a todas las herramientas de la revolución mediática, la ignorancia política, la pretensión de aniquilar la memoria esclarecedora y la vida que resurge irrefrenable en las multitudes de muertes producidas por el designio de exterminio de la diferencia, la instauración del miedo y el darwinismo social como únicos horizontes de sentido, la militarización general que desprecia los valores de las artes, las ciencias y las culturas de vida, como forma de existencia deseable, y la confrontación bélica interna y exterior como horizonte social ineludible.

Un proceso de esta naturaleza y magnitud, inscrito en el corazón del Sur de América en el momento en el que la región es observada como lugar de esperanza desde diversas latitudes por la emergencia de las culturas ancestrales de vida y de cuidado de la tierra hermanadas con formas políticas cada vez mas sensibles a la responsabilidad conjunta en la curación del planeta y a la singularidad de nuestros pueblos, exige una amplia, profunda y sostenida batalla de opinión que revele el carácter involutivo de la dinámica cultural basada en la mentira y en el aliento de las facetas mas feroces de la condición humana.

Una batalla de opinión que muestre a partir de las falsedades el valor inconmensurable del resplandor ético que ha preservado con entereza un sentido de la dignidad vital en tiempos en que la corrupción más abyecta ha causado incalculables estragos en nuestro territorio y amenaza con contagiar el entorno vecinal.

Amplios sectores sociales experimentan una fatiga y una repugnancia insuperables con un orden mafioso que ha convertido la vida social en una máquina trituradora de millones de seres por la miseria materia y espiritual que le es inherente, en estas amplias franjas sociales el conocimiento del tejido ético al que pertenecen organizaciones como Justicia y Paz, significa un horizonte vital cierto en medio de la desesperanza y la confusión expandida por quienes han sacrificado la verdad y su sagrado significado en los altares de la codicia.

Por: Héctor José Arenas A.
Tomado de: www.desdeabajo.info


(1) Ver : Orquestan campaña de difamaciones contra la Comisión Intereclesial de Justicia y Paz (05.01.10)
http://www.rebelion.org/noticia.php?id=98130&titular=orquestan-campaña-de-difamaciones-contra-la-comisión-intereclesial-de-justicia-y-paz